Para fomentar el sentido de la responsabilidad es recomendable empezar formándole a tu hijo poco a poco en el compromiso y la entrega, intentando que desde pequeño se encargue, dentro de sus posibilidades de actividades sencillas en casa. A medida de que tu hijo que vaya creciendo, puede ir adquiriendo responsabilidades más importantes y complejas.
Según los expertos, estas pueden ser las responsabilidades que se les pueden designar a los hijos de acuerdo a su edad:
Para niños de 5 a 7 años
Barrer pisos.
Ordenar su habitación.
Hacer su cama.
Colgar la toalla luego de bañarse.
Alimentar a las mascotas.
Poner la mesa.
Ayudar a levantar y lavar los trastes.
Colgar la ropa.
Recoger sus juguetes, libros, cuadernos, pinturas.
Preparar la mochila con todos los materiales que necesitan llevar al colegio y para sus actividades extraescolares: fútbol, natación, etc.
Cepillarse los dientes, lavarse las manos, peinarse, abrochaste la agujeta.
Preparase la ropa para la ducha.
Colaborar en la preparación de la ropa para el día siguiente.
Para niños de 8 a 12 años
Ayudar a hacer listas de compras del supermercado.
Ayudar a hacer las compras, para aprender así sobre precios, presupuesto familiar y manejo del dinero.
Guardar las compras en la alacena.
Prepararse desayunos y snacks simple.
Ayudar a preparar la cena.
Pasear al perro.
Hacer labores de jardinería.
Clasificar desechos para reciclar.
Sacar la basura.
Ayudar a lavar el automóvil.
Para jóvenes de los 12 en adelante
Hacer todos los deberes escolares sin que nadie se lo recuerde.
Ordenar su habitación incluyendo armarios y la cama bien hecha.
Organizar sus fiestas de cumpleaños.
Acudir a las actividades extraescolares con el equipamiento adecuado.
Aseo e higiene personal. Ducharse diariamente dejando el baño aseado.
Lavar los platos, quitar el polvo, limpiar el suelo.
Doblar y recoger su ropa.
Prepararse el almuerzo y la merienda. Cocinar comidas sencillas.
Organizar su ocio y tiempo libre.
Llevar las llaves de casa.
Anotar en la lista de la compra cosas que faltan.
Realizar compras.
Organizar sus libros, sus CDs de música.
Prepararse la maleta cuando se van de excursión, viaje, campamento, etc.
Acostarse a una hora razonable.
Levantarse a la primera vez que se les llama o poniéndose el despertador.
Tomarse la medicación pautada por el médico.
Alimentarse de forma adecuada, evitando “caprichitos”
Es obvio que para desarrollar la responsabilidad hay que darla. Cuando los padres sobreprotegen, a su hijo y hacen las tareas que él sólo podría hacer, no le dejan crecer como persona. Recuerda darle muchos elogios por lograr sus tareas y ten en mente que todo lo que perseveres en enseñarle a tu hijo le servirá para toda la vida.