Socialización en la Infancia
La socialización en la infancia es fundamental como un proceso de adquisición de conductas, hábitos, normas, reglas y actitudes sociales que le permitirá a tu hijo integrarse a la sociedad, por esta razón es importante que conozcas cómo puedes intervenir de forma temprana y acertada en esta área de desarrollo.
Existen muchas causas por las cuales tu hijo puede presentar dificultades de socialización en la infancia, lo que no le permitirá relacionarse adecuadamente con sus pares. Entre estas encontramos la timidez, la baja autoestima, la incapacidad para desarrollar sus habilidades sociales, la inseguridad y el miedo a la independencia.
¿Cómo puedes ayudar a tu hijo a su socialización en la infancia?
1. Si tu hijo muestra dificultad en la integración con sus pares, debes averiguar con exactitud que está motivando su negativa a tener amigos para que puedas tomar una acción correctiva. Esto lo lograrás mediante la observación y la comunicación.
2. En caso de que tu pequeño muestre timidez, es necesario que propicies actividades que le permitan integrarse con niños de diferentes edades, en un entorno donde tu hijo se sienta seguro de tal manera que esto promueva un mejor desempeño y refuerce su seguridad social. Puedes llevarlo a actividades extraescolares como deportivas, talleres, manualidades, etc.
3. Si muestra autoestima baja, seguramente experimenta sentimientos de inferioridad que no le permite establecer relaciones, por lo tanto es importante ayudándole a mejorar su auto concepto, brindándole afecto, destacando sus cualidades.
La falta de seguridad así como el miedo a la independencia están relacionados directamente a las relaciones parentales, ya que muchas veces para los padres no es fácil aceptar que parte del proceso de crecimiento de su hijo conlleva a la independencia, lo cual dificulta la socialización en la infancia.
Motivar a los niños a relacionarse y socializar, redundará en beneficio de una sana personalidad, ya que esto les permitirá a aprender a evitar conflictos y a saber manejarlos cuando inevitablemente ocurren. Los padres excesivamente estrictos o permisivos limitan las posibilidades de sus niños al evitar o controlar esos conflictos.
Es fundamental que como padre estés consciente de que tu hijo es el reflejo de tus acciones, por lo cual si deseas que tu hijo sea exitoso debes empezar desde ahora a trabajar en la construcción de su personalidad.
Fuente: Lic. Rosario Kúsulas
Especialista en Psicología Infantil
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