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Síndrome de Down en la Infancia

La educación del niño con Síndrome de Down comienza desde la familia  y está relacionada con la actitud de los padres. El niño debe permanecer y disfrutar psicoafectivamente del ambiente familiar, en clima de cariño y adaptación ya que sus primeras vivencias y experiencias marcarán su existencia.

La mayoría de los niños con Síndrome de Down pueden entender mucho más de lo que pueden expresar. Emplean oraciones más cortas para comunicarse, presentando dificultad en gramática y en tiempos verbales, poca claridad del habla por la disminución del tono muscular oral y facial.

Muchos de los niños con Síndrome de Down aprenden a leer, a escribir a sumar y a restar satisfactoriamente, no se les debe presionar durante su proceso de aprendizaje, ya que, la educación de estos niños debe estar centrada en aspectos concretos, sistemáticos e inmediatos.

También se destacan por un buen nivel memorístico, desarrollando un vocabulario adecuado, y llegando a pronunciar correctamente; todo esto se logra con paciencia y con la aplicación de ejercicios concretos y reiterativos.

Se debe tener una organización y dirección de las actividades de los niños para favorecer el efectivo aprendizaje de los contenidos y el conjunto de conductas que deberá desarrollar para conseguir los objetivos fijados dependiendo del período de maduración.

Las actividades deben de ser desde la estimulación temprana como por ejemplo actividades de sensación, percepción, atención, memoria, razonamiento, imaginación, orientación temporal y espacial, etc, habilidades motoras finas y gruesas, y técnicas de auto cuidado.

Para el adecuado desarrollo de tu hijo deben empezar a realizarse actividades que deben empezar en la cuna:

1. Estimular la fijación y seguimiento visual

  • Mostrarle  un objeto a la vez, cambiando tamaños y colores, uno muy cerca de sus ojos y tratando de que tenga la cabeza derecha.
  • Cuando ya haya logrado fijar sus ojos en los objetos, irlos desplazando primero lento y luego más rápido.

2. Estimular la percepción auditiva

  • Buscar objetos que emitan sonidos diferentes, y agradables, y luego dárselos para que los manipule.

3. Estimular la coordinación visomotora

  • Acostarlo en una colchoneta mostrándole  objetos y estimulándolo para que los tome.
  • A medida que  va creciendo ponerlo cada vez a más distancia y luego poner a su disposición distintos objetos y juguetes.

4. Ejercitación auditiva y rítmica

  • Es importante utilizar diversas canciones, así como instrumentos musicales que puedan estimular su percepción auditiva.
  • Hacer que imite sonidos como por ejemplo: ruidos de campanas, de un reloj, sonidos de animales, palabras monosílabas, sonidos emitidos por el adulto.

5. Ejercitación previa a la marcha

  • Darle masaje con la palma de la mano, comenzando desde el cervical al sacro, luego en piernas, brazo, torso, espalda.
  • Hacerlo rodar con ayuda de otra persona.

6. Ejercicios de motricidad fina

  • Realizar actividades como rasgar y arrugar papeles, apretar con ambas manos una pelotita compacta, de esponja o goma, pintar con diferentes materiales, armar y desarmar rompecabezas con un mínimo de 10 piezas.

7. Ejercicios de Lenguaje

  • Realizar movimientos de la lengua dentro de la boca hacia cada uno de los maxilares y debajo de cada uno de los labios sin separarlos.
  • Realizar movimientos de la lengua sacándola y punteando, llegando a la barbilla; hacia la nariz, costado de la boca lo más amplio que se pueda.
  • Jugar a inflar la boca, llenándola con aire y dar golpes suaves sobre los pómulos, expeliendo simultáneamente el aire de una sola vez con un soplido.
  • Soplar hojas de papel con los labios levemente separados, inhalando el máximo de aire posible y exhalando hasta poder doblar la hoja.

8. Ejercitación bucal

  • Evitar el uso del chupón.
  • Beber en vaso entrenador.
  • Beber en vasos o jarritos con mango.
  • Masticar trozos de plátano, peras, manzanas, hasta llegar a deglutir alimentos como: papas, zanahoria y finalmente carne.

El objetivo de estimular a los niños con Síndrome de Down no es sólo para la adquisición de habilidades, sino para que éstas se alcancen mucho antes, permitiendo continuar con programas educativos que los integren a su entorno. 


Fuente: Lic. Lesly Merchand

Especialista en Audición y Lenguaje

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