¿Cómo establecer una rutina diaria?

Como lo comentamos con anterioridad, a medida que tu hijo crece debe adaptarse a una realidad conformada por varias normas y límites por lo que establecer una rutina diaria es fundamental para tener un desarrollo integral.

Otros beneficios de establecer una rutina diaria con tu hijo

• Siente que te preocupas por él
• Se siente seguro y confiado
• Aprende patrones de conducta social
• Aprende a manejar sus emociones
• Aprende a ser independiente
• Aprende a desempeñar su rol en la familia
• Aprende a ser responsable y organizado en las actividades tanto de la casa y como en la escuela.

¿Cómo establecer una rutina diaria en cada edad?

• De 0 a 1 año: Se le deben fomentar los hábitos de sueño, alimentación y juego. De 1 a 4 años: debes darle órdenes sencillas, las cuales tienen que ser supervisadas por ti como acomodar sus juguetes, limpiar su recámara, doblar su ropa, etc.
• De los 4 en adelante: debes establecer órdenes y actividades más complejas como bañarse solo, comer solo, poner la mesa, lavar los trastes, su ropa, etc.

Ahora bien, se flexible: Negocia con tu hijo las actividades y horarios a medida que vaya creciendo y vayan cambiando sus gustos y necesidades.

Es importante establecer una rutina diaria de acuerdo a su edad así que planifica las actividades con tu hijo y haz que participe. Utiliza los diferentes momentos del día para hablar con él para anticiparle los cambios que puedan darse en o durante los próximos días, de modo que no se vea afectado por la nueva situación.

Todas las rutinas que establezcas deben responder a las necesidades y los ritmos reales de tu hijo, teniendo en cuenta las horas que debe dormir para su edad, su horario escolar, el tiempo que necesita para jugar.

Es importante que algunas de esas pautas diarias las sigan toda la familia juntos como comer y cenar a la misma hora, dedicar todos un rato a hacer “deberes” (ya sean estos preparar cosas del trabajo, hacer la comida o las tareas escolares, etc.)

Cuando sea muy pequeño deberás decirle lo que toca en cada momento, pero a medida que crezca y se habitúe, interiorizará estas rutinas y las hará sin necesidad de que se lo recuerdes.

Para que tu hijo acepte mejor sus obligaciones diarias, permítele establecer una rutina diaria, sus propias reglas y elija aquello que pueda, por ejemplo, en qué quiere dedicar sus ratos libres, qué deberes prefiere hacer primero.

Es importante que cuando establezcas la rutina diaria abarques todos los aspectos de la vida de tu hijo; la alimentación, el sueño, la higiene, el estudio. De esta forma te resultará más fácil que coma, se vaya a la cama, haga sus deberes y el resto de obligaciones de manera responsable.

Recuerda que “La rutina diaria es para los niños lo que las paredes son para una casa, les da fronteras y dimensión a la vida”.  (R. Driekurs)

 Fuente: Lic. Yuri Ugarte

Especialista en Aprendizaje

Reconstruye, Centro Psicopedagógico Especializado