Terapia de aprendizaje o regularización
Cuando tu hijo tiene un bajo rendimiento escolar, es deber de la escuela informarte oportunamente esta situación; para que de manera conjunta se tomen las decisiones pertinentes para apoyarlo y lograr que su rendimiento sea óptimo.
Algunas de las recomendaciones por parte de la maestra de tu hijo pueden ser que acuda a clases de regularización debido a que presenta dificultades para la lectura, la escritura o las matemáticas, lo cual puede ser la causa de que tu hijo muestre un rendimiento escolar por debajo de lo esperado para su grado escolar. Sin embargo, es muy común que exista una confusión en identificar si lo que requiere tu hijo es una regularización o una Terapia de Aprendizaje.
La diferencia entre una clase de regularización o una Terapia de Aprendizaje radica en que en la primera sólo se abordan contenidos específicos en los que tu hijo muestra dificultad, es decir, es un repaso. En la Terapia de Aprendizaje se trabajan los procesos mentales que logran estimular las áreas cerebrales encargadas de memorizar, comprender y mantenerse atento ante una situación o actividad, lo que se refleja de forma positiva en el rendimiento escolar de tu hijo.
Por lo tanto, un problema de aprendizaje que suele presentarse en los niños en edad escolar, debe ser diagnosticado por un especialista a través de una evaluación psicopedagógica en donde se obtiene un perfil de sus habilidades cognitivas y se verifica la discrepancia entre sus capacidades y su rendimiento escolar para diseñar un plan de trabajo individual de acuerdo a sus necesidades. Jamás puede ser diagnosticado simplemente por las evidencias de trabajo en la escuela.
Dentro de la Terapia de Aprendizaje se promueve en tu hijo el desarrollo de estrategias que favorezcan sus áreas de oportunidad y que poco a poco sean transferidas al contexto escolar, por lo que es de vital importancia que la terapeuta esté en permanente contacto con la escuela, pues de esta manera podrá llevar un seguimiento cercano y hacer los cambios necesarios en caso de que los avances no sean observados.
Entonces, una Terapia de Aprendizaje siempre tendrá como objetivo proporcionar una atención adecuada al pequeño que presente problemas en el aprendizaje de determinadas actividades, brindando un apoyo en las diferentes situaciones en las cuales presente conflicto.
¿Mi hijo necesita una terapia de aprendizaje?
Solo es cuestión de observar bien si tu hijo presenta dificultad para realizar actividades sencillas, problemas para aprender, falta de destreza, complicaciones al leer o escribir, razonamiento matemático o complejidad al expresarse. Si es de esta forma, te recomendamos acudir a un especialista en el área de aprendizaje para que de manera profesional pueda asesorarte al respecto.
Realizar una intervención en el momento oportuno tendrá resultados favorables en aspectos fundamentales para el aprendizaje de tu hijo, como son la motivación y la disposición. Se trata, por consiguiente de un trabajo en equipo donde padres, maestros y terapeutas tendrán la responsabilidad de establecer una adecuada comunicación con fin de beneficiar al desarrollo cognitivo de tu hijo.
Fuente: Yuri Ugarte
Especialista en Aprendizaje
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